Qué hacer en Akaroa
Nueva Zelanda

Qué hacer en Akaroa – Nueva Zelanda

Si te estás preguntando qué hacer en Akaroa, llegaste al lugar indicado amego.

Con la premisa de disfrutar al máximo los últimos días de Aníbal en Nueva Zelanda, estamos tratando de hacer lo más posible (desde donde podemos porque yo sigo trabajando). Así que el domingo pasado (mi día de viaje N° 428) finalmente fuimos a Akaroa.

Parece que lo hago apropósito pero siempre que voy a un lugar nuevo termino diciendo “de los mejores lugares que vi”…pero es que…es la verdad. Nueva Zelanda nunca deja de sorprenderme. Incluso si los paisajes se repiten, incluso si una montaña nevada es una montaña nevada en todos lados. Siempre hay un plus, un extra que a cada pueblito lo hace único. Y esta ciudad no fue la excepción.

Qué hacer en Akaroa

Salimos el domingo tipo diez en auto con unos amigos chilenos y en una hora y media estábamos ahí. Otro detalle neozelandés que ya pierde sentido de tanto repetirse es que todos los viajes son increíbles. Porque no hay un minuto en que el paisaje no te maraville. Además de que por suerte el domingo fue un día excelente, soleado, con calorcito por lo que el camino estuvo lleno de familias en bici, de pic-nic, haciendo caminatas. Si voy a extrañar algo de Nueva Zelanda (por no decir que voy a extrañar mil cosas) es lo “aventureros” que son. Les encanta el aire libre, el deporte y se nota. Siempre hay familias acampando, en bici. Ahhhh malditos, los voy a extrañar.

Llegamos a Akaroa alrededor de las 12. Entre el paisaje, el clima, la nostalgia de todos los días… Akaroa te amé. Además de los paisajes en sí, al ser un establecimiento francés y británico tiene un encanto europeo antiguo hermoso. Las construcciones y arquitectura colonial le dan un toque increíble.

Caminamos un rato por la playa, bordeando el pueblo y pasando por todos los negocios, bares y café que por supuesto rebalsaban de gente disfrutando el día. Toda la semana había sido hermosa y soleada por lo que todos asumimos que el finde iba a llover, porque pasa, porque en Nueva Zelanda pasa el 80% de las veces. Pero por suerte esta vez no, esta vez el sol nos acompañó de lunes a lunes.

Decidimos ir al I-site a preguntar qué caminatas podíamos hacer en corto plazo porque teníamos que estar en Christchurch alrededor de las 6. Akaroa tiene un montón de opciones turísticas, desde paseos en bote para ir a ver la colonia de pingüinos hasta las caminatas accesibles (gratis y que no demoran mucho tiempo) para todo el mundo. Decidimos hacer las únicas dos que duraban menos de dos horas.

La primera caminata que hicimos quedaba dentro de la ciudad, dura apróximadamente media hora y pasa por dos cementerios históricos, uno anglicano y otro cristiano, para terminar en la playa al lado de un faro.

La otra fue la Children’s Bay que queda saliendo del pueblo, en dirección a Christchurch. Nos llevó alrededor de una hora (ir y volver) y fue la más divertida. Porque estaba todo embarrado así que tuvimos un poco de turismo aventura. Obviamente que en un momento tratando de hacer equilibrio mi zapatilla se enterró y levanté el pie y la zapatilla quedó en el barro y casi me caigo de culo al piso. Quedé haciendo equilibrio mientras Aníbal se tentó y me señalaba y se reía y yo me tenté también y no podía hacer fuerza para mantenerme “en pie”. Pero por suerte solo fueron unos minutos de risa y Angie en tres patas tratando de volver a ponerme la zapatilla sin tener que sentarme en el barro.

Por el otro motivo que la caminata fue divertida es que la señora del I-site nos dijo que la caminata culminaba en un rinoceronte de metal. Lo cual nos pareció bizarro, raro y totalmente fuera de lugar. O sea…un rinoceronte…de…metal…en…una caminata en Nueva Zelanda…cualquiera. No sé qué flashearon. Lo más gracioso también fue que antes de llegar al rino, había cuatro jirafas, de metal también…en el medio del pasto…onda…WHAT THE FUCK AKAROA!?!? Encima, a todo esto, llegamos a la cumbre, una vista espectacular, pero no veíamos ningún rinoceronte. Solo un grupo de 20 vacas que nos miraban amenazantes. Como siempre…siempre tengo vacas que me miran amenazantes…no sé por qué. Y no sabíamos si seguir caminando o no porque era una propiedad privada. Así que después de ver cómo de a poco las vacas nos iban rodeando decidimos volver para atrás, asumiendo que la señora del I-site se había confundido y no era un rinoceronte sino jirafas.

Qué hacer en Akaroa

Cuando íbamos caminando, al subir a un pequeño cerco, me doy vuelta a mirar a las vacas y veo, bien en el medio del grupo de vacas, al famoso rinoceronte…ahí en la cumbre ¿por qué? ¿por qué un rinoceronte? Pero en fin. Ahí estaba. Así que volvimos para tratar de acercarnos pero las vacas no se movían así que nos tuvimos que conformar con fotografiarlo de lejos.

Luego de esta caminata, volvimos a Akaroa para tomar un buen café...como corresponde. Todo debería culminar en un café (y después en un bar). Riquísimo. Y yo me pedí, como bien cerdo salvaje con problemas de tiroides que soy, una walnut de café…ahhh por Dios…demasiado bueno…una bomba…pero la mejor bomba de mi vida.

Aunque, señores, ésto no termina ahí…camino a Christchurch…pasamos…por…una……….CHEESE FACTORY, la Barry’s Bay Cheese Factory. No me acuerdo si lo dije pero amo el queso…viviría a queso…a queso y a mates. En fin…paramos…compramos cuatro quesos y seguimos. Para llegar a casa y que los quesos duren media hora pero bueno. Uno de hierbas fue lo mejor que me pasó en meses. AHHH ESTÚPIDOS Y SENSUALES QUESOS.

En fin. Akaroa express fue un diez en lo que respecta a recorridos de fin de semana neozelandeses. Lo recomiendo muchísimo. Tanto por los paisajes como por el pueblo en sí.

Si andan por la zona de Canterbury y no saben qué hacer los findes, Titín ya les avisó. Akaroa es y debería ser una parada obligada.

Angie!


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4 Comentarios

  • Anibal

    Boluda, cuando salimos de la ruta y vi todo ese paisaje fue increíble mal, aparte el pueblito todo tipo colonial, es muy buena onda. Y los viejos que nos preguntaron si eramos argentinos jaja, saltó la ficha.
    El coso ese de metal boluda que paja nos matamos buscandolo y de pedo lo viste cuando nos estabamos por ir, malditas vacas asesinas que nos querian comer y por eso no pudimos acercarnos.

  • Lis

    chabonaa, dejá de sacar fotos tan hermosas *__* la primera me deja con la boca abierta y con ganas de teletransportarme a Akaroa *__*