trabajo de temporada
Uncategorized

Trabajo de temporada cuando tenés más de 35 años

Trabajo de temporada sí sí, si andás viajando probablemente lo hayas hecho. Hoy quiero hablar de este tema porque me llegó por Instagram un mensaje de una chica en Andorra, también haciendo trabajo de temporada, me contaba que le estaba costando adaptarse física y emocionalmente. Su mensaje decía algo así:

“Me está costando bastante adaptarme física y emocionalmente, el ego tira un poco porque hago un trabajo tan físico y no calificado cerca de los 40 años. Lo tomo como un desafío, pero no sé si es solo un proceso interno mío o algo que le pasa a otros”.

Me pareció un tema súper interesante porque creo que a mucha gente le pasa, aunque no siempre se hable. Así que quería contarles mi experiencia y cómo lo vivo hoy en día.

Mi Experiencia en Suiza

trabajo de temporada

Actualmente tengo 37 años y estoy haciendo temporada de invierno en un pueblito suizo, trabajando de housekeeper en un hotel. En este pueblito, aunque muuuy pequeño, me doy cuenta de que no estoy sola: hay muchísima gente haciendo lo mismo. Eso me da apoyo moral y me hace sentir que no está mal, sino que simplemente es una elección de vida distinta.

No me afecta la edad porque no me siento limitada por lo que la sociedad espera de alguien de 37 años, además de que por suerte la sociedad cambió. De la forma que yo lo interpreto, tengo un trabajo que me permite juntar plata rápido para seguir viajando, así que cumple su propósito.

Comparación con mi entorno

En mi equipo hay chicas de 24 a 26 años, y algunas más grandes, de 41 a 45. No importa la edad: todas están haciendo el mismo trabajo, algunas por necesidad económica y otras porque quieren la experiencia. Lo importante es que nadie se siente juzgado por esto.

En mi caso, esto me hizo reflexionar sobre cómo los millennials fuimos los primeros en romper con el sistema tradicional: trabajar toda la vida en el mismo lugar, comprar una casa, formar una familia “porque toca”. Hoy tenemos la oportunidad de vivir distinto y eso está buenísimo.

Trabajo de temporada: Cuerpo y energía

Obviamente, hacer trabajo físico cambia con los años. Antes podía salir de fiesta todos los días y trabajar al otro día sin problema. Ahora, a los 37, una resaca puede durar dos o tres días. Aprendí a cuidarme: si sé que trabajo temprano, no tomo alcohol, no salgo todos los días y priorizo el descanso.

El trabajo de temporada me desafía físicamente, pero también me enseña a conocer mis límites y a disfrutar de la experiencia sin presionarme por cumplir expectativas externas.

Filosofía de vida

Uno de mis mayores aprendizajes es que cuanto más firme estás en tus creencias y objetivos, menos te afecta lo que diga o haga el entorno.

Yo siempre tuve claro que quiero vivir experiencias, y esto incluye salir de mi zona de confort, hacer trabajos diferentes y aprender cosas nuevas, como ahora que estoy aprendiendo snowboard (¡y cayéndome un montón!).

Reflexión final

No dejes que la edad, las presiones sociales o lo que “se supone” que deberías estar haciendo te impida hacer algo que querés, que disfrutarías o que simplemente te gustaría experimentar. Hacer un trabajo de temporada puede ser increíblemente enriquecedor: conocés gente de todo el mundo, aprendés cosas nuevas, y te da independencia económica y personal.

Si están pasando por algo parecido o tienen experiencias trabajando en temporada, me encantaría leerlas.


¿Querés descuentos para tu viaje? 

Probá tu seguro con SafetyWings: Quiero mi descuento

Quiero housesittear: 25% de descuento en Housesitting

¿Te pinta hacer un voluntareado? Worldpackers  

¿Necesitás abrirte una cuenta en USD? Wise 

Dejar una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.